Escrito por Juan José Rojas Alpízar
jrojas@revistacupcake.com
El pasado jueves 20 de febrero la Galería Equilátero invitó a vivir una muestra dedicada a los hábitos de la sociedad. De la mano de Obra Gris y ST. Desiderata, los asistentes pudimos observar más allá de las piezas de Juan Inzirillo para introducirnos mediante el performance a la realidad artística oculta detrás de la cotidianidad y los objetos de culto presentes en ella.
Bajo el esquema de la descripción “nadie nace con ellos, se adquieren, no suceden sin ser ocasionados” los artistas se encargaron de acentuar alrededor de la mesa algo tan común como una conversación amena, la cual de pronto se convertía en una construcción artística que vista desde un reflector macro es similar a un cadáver exquisito. Debo admitir que al inicio no logré comprender lo que sucedía, ingresé a un cuarto cuyo centro estaba ocupado por una en mesa a la cual estaban sentadas una serie de personas sin ninguna unidad visual, sobre ella se encontraban objetos colgando. Fue hasta que tras del silencio de las demás personas en el cuarto, el grupo empezó a cortar los hilos que sostenían las piezas e iniciaron la construcción de su obra; 30 minutos después, sobre la mesa yacían las distintas obras.
Ingrid Cordero, diseñadora de Obra Gris comentó que este acto refería al paso de lo cotidiano a lo artístico mediante un impulso externo, esto ya que a pesar de que todas las personas involucradas comparten afinidad por el diseño y experiencia en distintas áreas, nunca había trabajado entre ellos.
Posterior al performance, los enlaces se fueron conectando e hicieron descubrir que las seis mujeres que vestían piezas de Obra Gris era parte del happening de lanzamiento de la nueva pieza de estos diseñadores. En el área principal de Equilátero, las seis mujeres caminaron y transformaron el Vestido Múltiple para evidenciar las ocho formas de utilizar esta pieza.
“El diseño del Vestido Múltiple es adaptable y muta según las necesidades de cada persona que lo habite. El vestido creado bajo el principio de diseño llamado Zero Waste Design (diseño sin desperdicio) es una pieza icónica de la marca que, tres años después de su concepción, sigue sumando alternativas a partir de la apropiación de quien lo use” señalan sus diseñadores.
Junto al ritmo de la noche, Equilátero continuaba recibiendo a más personas. La exposición que invitaba a observar los hábitos se volvía más concurrida y cada vez más llamativa.